Si, existe un mundo de oportunidades, por supuesto que si, pero no lo busques allá afuera, porque esta dentro de ti. Y de esto estoy convencido…
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… Y por eso lo comparto, porque estas oportunidades se hacen presentes en cada momento de nuestras vidas, desde ese primer momento en que al abrir los ojos cada mañana tenemos la oportunidad de elegir nuestros pensamientos y con ellos asumir una actitud que nos permita verdaderamente disfrutar de nuestro día a día, hasta ese momento en el que al retirarnos a descansar tenemos la genial oportunidad de expresar nuestra gratitud por el maravilloso hecho de formar parte de este universo, y tener el privilegio de aprender de todo cuanto en el existe.
… Y por eso lo comparto, porque estas oportunidades se hacen presentes en cada momento de nuestras vidas, desde ese primer momento en que al abrir los ojos cada mañana tenemos la oportunidad de elegir nuestros pensamientos y con ellos asumir una actitud que nos permita verdaderamente disfrutar de nuestro día a día, hasta ese momento en el que al retirarnos a descansar tenemos la genial oportunidad de expresar nuestra gratitud por el maravilloso hecho de formar parte de este universo, y tener el privilegio de aprender de todo cuanto en el existe..
Y en el trayecto nos relacionamos. Nos relacionamos con las personas que integran “nuestro núcleo familiar”, con “nuestros amigos”, “nuestros compañeros de trabajo”, “nuestros clientes”, “nuestras posibles conquistas” (quienes acostumbran a eso) : ) y un largo etcétera de estas “Etiquetas” de las cuales hasta ahora muy poco conciencia teníamos de cuanto las utilizábamos.
Pero estas “Etiquetas” ahora no solo se están haciendo más evidentes y hasta necesarias, con la proliferación de las cada vez más influyentes Redes Sociales tanto en los personal como en lo profesional este sistema de “clasificación” de las personas con las cuales interactuamos adquiere un carácter “publico” que resulta agradable y conveniente para muchos, y desagradable e inconveniente para muchos otros.
Quienes utilizan sobre todo Facebook o Twitter, entre otros sistemas parecidos, saben a lo que me refiero, y este debate a cobrado fuerza con la reciente implementación en Twitter de las llamadas “Listas”, sistemas de clasificación que permite a cada usuario agrupar a los contactos que desee, tanto de su propia red de contactos como de cualquier otra, bajo las “etiquetas” que el mismo decida implementar.
Entonces, “Etiquetar o que nos Etiqueten”, he aquí el dilema, pero también las oportunidades, y a continuación explico mis razonamientos:
• SER ETIQUETADOS:
Y en el trayecto nos relacionamos. Nos relacionamos con las personas que integran “nuestro núcleo familiar”, con “nuestros amigos”, “nuestros compañeros de trabajo”, “nuestros clientes”, “nuestras posibles conquistas” (quienes acostumbran a eso) : ) y un largo etcétera de estas “Etiquetas” de las cuales hasta ahora muy poco conciencia teníamos de cuanto las utilizábamos.
Pero estas “Etiquetas” ahora no solo se están haciendo más evidentes y hasta necesarias, con la proliferación de las cada vez más influyentes Redes Sociales tanto en los personal como en lo profesional este sistema de “clasificación” de las personas con las cuales interactuamos adquiere un carácter “publico” que resulta agradable y conveniente para muchos, y desagradable e inconveniente para muchos otros.
Quienes utilizan sobre todo Facebook o Twitter, entre otros sistemas parecidos, saben a lo que me refiero, y este debate a cobrado fuerza con la reciente implementación en Twitter de las llamadas “Listas”, sistemas de clasificación que permite a cada usuario agrupar a los contactos que desee, tanto de su propia red de contactos como de cualquier otra, bajo las “etiquetas” que el mismo decida implementar.
Entonces, “Etiquetar o que nos Etiqueten”, he aquí el dilema, pero también las oportunidades, y a continuación explico mis razonamientos:
• SER ETIQUETADOS:
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Principal Dilema: Ser etiquetado bajo una descripción que resulte ofensiva, discriminatoria o desagradable para mi persona.
Oportunidad: Quien de esta manera proceda, lejos de perjudicarnos, afecta de inmediato su propia imagen, deteriorando su credibilidad y sus niveles de influencia en la comunidad. La oportunidad es aprender de esto, y ser espontáneos pero respetuosos con nuestras propias clasificaciones; clasificaciones estas que podrían a la larga convertirse en factor de prestigio ante las cuales otras personas se sentirían inspiradas en hacer merito para tener el honor de ser considerados por ti. Si alguien me etiqueta negativamente con la supuesta intención de perjudicar mi imagen o burlarse de ella, en realidad me esta diciendo a gritos que rebasan las fronteras “Tu me resultas tan notorio y es tanto lo que te envidio, que te coloco en esta lista para llamar tu atención, e intentar desahogar mi frustración”. Seamos humildes, y aprendamos de ello.
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Segundo Dilema: Aparecer en muy pocas listas y/o grupos.
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Oportunidad: ¿Tienen estas listas algo en común? ¿Puedes determinar el criterio favorable utilizado? ¿Ya lo hiciste? ¡Esa es una fortaleza! Concéntrate en ella; ¡Explótala!
Principal Dilema: Ser etiquetado bajo una descripción que resulte ofensiva, discriminatoria o desagradable para mi persona.
Oportunidad: Quien de esta manera proceda, lejos de perjudicarnos, afecta de inmediato su propia imagen, deteriorando su credibilidad y sus niveles de influencia en la comunidad. La oportunidad es aprender de esto, y ser espontáneos pero respetuosos con nuestras propias clasificaciones; clasificaciones estas que podrían a la larga convertirse en factor de prestigio ante las cuales otras personas se sentirían inspiradas en hacer merito para tener el honor de ser considerados por ti. Si alguien me etiqueta negativamente con la supuesta intención de perjudicar mi imagen o burlarse de ella, en realidad me esta diciendo a gritos que rebasan las fronteras “Tu me resultas tan notorio y es tanto lo que te envidio, que te coloco en esta lista para llamar tu atención, e intentar desahogar mi frustración”. Seamos humildes, y aprendamos de ello.
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Segundo Dilema: Aparecer en muy pocas listas y/o grupos.
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Oportunidad: ¿Tienen estas listas algo en común? ¿Puedes determinar el criterio favorable utilizado? ¿Ya lo hiciste? ¡Esa es una fortaleza! Concéntrate en ella; ¡Explótala!
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“No pierdas tu tiempo corrigiendo tus debilidades, aprovecha tu tiempo explotando tus fortalezas”
“No pierdas tu tiempo corrigiendo tus debilidades, aprovecha tu tiempo explotando tus fortalezas”
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Tercer Dilema: Estas en muchas listas y o grupos.
Oportunidad: Felicítate por ello, y aprovecha la oportunidad de hacer un ejercicio de humildad que te permita ganarte mas que la admiración, el respeto de las personas, digno ejemplo de esto es el amigo Juanes, (@juanestwiter), es admirable realmente la manera en que este amigo interactúa con las personas que tenemos el agrado de seguir sus mensajes en Twitter. Un ejemplo a seguir.
• ETIQUETAR:
Tercer Dilema: Estas en muchas listas y o grupos.
Oportunidad: Felicítate por ello, y aprovecha la oportunidad de hacer un ejercicio de humildad que te permita ganarte mas que la admiración, el respeto de las personas, digno ejemplo de esto es el amigo Juanes, (@juanestwiter), es admirable realmente la manera en que este amigo interactúa con las personas que tenemos el agrado de seguir sus mensajes en Twitter. Un ejemplo a seguir.
• ETIQUETAR:
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La oportunidad de seguir y experimental el poder de un gran principio de la convivencia humana, que todos conocemos y muy pocos ponemos en práctica: “No haga a los demás lo que no quieres que te hagan a ti mismo”. Ser originales, ser nosotros mismos es la regla a seguir, el respeto una cuestión de principios, que da muy buenos resultados y satisfacción personal.
La oportunidad de seguir y experimental el poder de un gran principio de la convivencia humana, que todos conocemos y muy pocos ponemos en práctica: “No haga a los demás lo que no quieres que te hagan a ti mismo”. Ser originales, ser nosotros mismos es la regla a seguir, el respeto una cuestión de principios, que da muy buenos resultados y satisfacción personal.
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Existe sin embargo, cuando nos corresponde someter a las personas con las cuales tenemos contactos de una u otra manera a un sistema de clasificación de carácter publico algunas reservas que tienen que ver con nuestro temor, ciertamente lógico, de “herir” la sensibilidad de las personas, o bien por incluirlas o bien por dejar de hacerlo en determinadas categorías, y en este caso, muy particularmente, me aferro a otra máxima, y es que es nuestra intención particular la que prevalece, asumiendo que como cada quien en su estilo hemos creado nuestra clasificación con la mejor buena fe, siendo imposible intentar satisfacer los intereses particulares de cada persona con la cual interactuamos; lo que si podemos es transmitir nuestra chispa, buen criterio, intereses específicos o tipos de simpatía, que nos pueden motivar a considerar a una u otra persona a ser tomada en cuenta para formar parte de nuestros grupos específicos de contacto, lo cual, observado desde el cristal positivo, es un claro estimulo a la mejora continua de nuestras relaciones, así lo veo.
Insisto con mi planteamiento original, las oportunidades están dentro de nosotros mismos, los nuevos sistemas de comunicación e intercambio de información, ideas y/o recursos ahora más que antes nos obligan a entenderlo, a aceptarlo y aprovecharlo de la mejor manera posible.
La “riqueza” de nuestras relaciones, y no me refiero a lo material, puede ser, y lo es de hecho, determinante para el éxito de muchos de nuestros proyectos tanto profesionales como de otra índole.
Decidamos pues si seremos nuestro mayor impulso, o nuestro peor obstáculo aferrandonos a prejuicios impuestos por nosotros mismos.
Existe sin embargo, cuando nos corresponde someter a las personas con las cuales tenemos contactos de una u otra manera a un sistema de clasificación de carácter publico algunas reservas que tienen que ver con nuestro temor, ciertamente lógico, de “herir” la sensibilidad de las personas, o bien por incluirlas o bien por dejar de hacerlo en determinadas categorías, y en este caso, muy particularmente, me aferro a otra máxima, y es que es nuestra intención particular la que prevalece, asumiendo que como cada quien en su estilo hemos creado nuestra clasificación con la mejor buena fe, siendo imposible intentar satisfacer los intereses particulares de cada persona con la cual interactuamos; lo que si podemos es transmitir nuestra chispa, buen criterio, intereses específicos o tipos de simpatía, que nos pueden motivar a considerar a una u otra persona a ser tomada en cuenta para formar parte de nuestros grupos específicos de contacto, lo cual, observado desde el cristal positivo, es un claro estimulo a la mejora continua de nuestras relaciones, así lo veo.
Insisto con mi planteamiento original, las oportunidades están dentro de nosotros mismos, los nuevos sistemas de comunicación e intercambio de información, ideas y/o recursos ahora más que antes nos obligan a entenderlo, a aceptarlo y aprovecharlo de la mejor manera posible.
La “riqueza” de nuestras relaciones, y no me refiero a lo material, puede ser, y lo es de hecho, determinante para el éxito de muchos de nuestros proyectos tanto profesionales como de otra índole.
Decidamos pues si seremos nuestro mayor impulso, o nuestro peor obstáculo aferrandonos a prejuicios impuestos por nosotros mismos.
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No son las opiniones de los demás las que nos afectan, sino las ideas que al respecto nos formamos nosotros mismos, y esto es importante.
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Un gran abrazo desde mí querida Venezuela. Pido disculpas a todos los que me leen por mi ausencia en sus respectivos Blog’s, este período es de particular importancia en mis actividades de negocio, y finalizando un año que ha estado plagado de retos y exigencias pues la situación amerita mucho de mi atención. Seguro estoy sabrán ustedes disculparme mientras se mantenga esta situación, aunque de a poco retomare esas visitas que tanta satisfacción me produce.
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Éxitos y Bendiciones y no olviden… ¡A Pensar en Grande!!! Vale la Pena.
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Un gran abrazo desde mí querida Venezuela. Pido disculpas a todos los que me leen por mi ausencia en sus respectivos Blog’s, este período es de particular importancia en mis actividades de negocio, y finalizando un año que ha estado plagado de retos y exigencias pues la situación amerita mucho de mi atención. Seguro estoy sabrán ustedes disculparme mientras se mantenga esta situación, aunque de a poco retomare esas visitas que tanta satisfacción me produce.
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Éxitos y Bendiciones y no olviden… ¡A Pensar en Grande!!! Vale la Pena.
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